Un perfume único, ya que no se parece a ninguno que haya probado, ni siquiera a alguno de la línea de Terre d’Hermès.
Un perfume difícil de llevar, no se para que situaciones sería adecuado, pero en cierto modo adictivo.
Para mí es más una experiencia olfativa que un perfume para uso común. Recomiendo probarlo antes de hacer cualquier compra a ciegas.
En la salida se siente la pimienta, el café y el regaliz, dándole un toque Gourmand, una fragancia picosita, adictiva como el café.
En el secado se sigue percibiendo esa mezcla peculiar, pero acompañada de un olor a mineral a sal, simulando la lava supongo.
Es un perfume para personas que se perfuman para ellos, no para los demás.